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RPP le realizó una entrevista a Daniel Rodríguez Risco, director de la cinta peruana «Cuadrilátero», la cual obtuvo dos reconocimientos luego de su debut mundial en la trigésima octava entrega del Festival Internacional de Cine de Friburgo en Suiza.

La película peruana “Cuadrilátero”, del director Daniel Rodríguez Risco, conquistó dos distinciones tras su estreno mundial en la trigésima octava edición del Festival Internacional de Cine de Friburgo (FIFF, por sus siglas en francés) en Suiza, que se realizó entre el 15 y 24 de marzo.

La Embajada del Perú en Suiza acompañó el estreno del largometraje peruano, que contó con la presencia del director, las actrices Lizet Chávez y Valentina Saba, el coguionista Gonzalo Rodríguez Risco y la productora Lucia Utano, en la función especial organizada por el Festival con presencia del jurado.

La organización del Festival Internacional de Cine de Friburgo (FIFF) en Suiza acaba de difundir cuáles son las doce películas seleccionadas para la Competencia Internacional de su 38ª edición. Entre las seleccionadas se encuentran Cuadrilátero, película peruana dirigida por el galardonado cineasta Daniel Rodríguez Risco (El acuarelista, El bientre, Siete semillas y próximamente La costurera).

Fueron más de dos mil los largometrajes de distintos países los que postularon por lograr un espacio en el reconocido festival.

El sábado 23 de marzo se llevó a cabo la ceremonia de clausura del Festival Internacional de Cine de Friburgo (FIFF), donde la película peruana “Cuadrilátero”, dirigida por Daniel Rodríguez Risco, se alzó con dos importantes reconocimientos: el Premio Especial del Jurado y el Premio del Jurado Joven.

El Premio Especial del Jurado, otorgado al director de la película es seleccionada por el Jurado Internacional por su creatividad en el guión y la dirección, así como por su audacia temática y formal, lo que representa un hito significativo para el equipo detrás de “Cuadrilátero”.

Fueron más de dos mil los largometrajes de todo el mundo los que aplicaron por lograr un espacio en el festival y el jurado conformado por importantes directores, productores y realizadores eligió a la cinta peruana protagonizada por Lizet Chávez (Adriana), Amil Mikati (Tomás), Gonzalo Molina (Alfredo), Valentina Saba (Lucía) y Fausto Molina (Felipe).

Se observa una difuminación de la realidad, para dar pie a una existencia utópica reflejada en las ilusiones de los protagonistas.

Entrevista. Aitana Sánchez-Gijón, una de las grandes actrices del cine español, se encuentra en Lima por primera vez para filmar “La costurera” junto a Mayella Lloclla, bajo la dirección de Daniel Rodríguez Risco.

Aitana Sánchez-Gijón ha tenido su primer acercamiento a la escena cultural limeña viendo la obra teatral El monstruo de Armendáriz. Es también su primera vez en el Perú, una deuda personal que recién salda por la filmación de La costurera, una película con toques fantásticos que su coprotagonista Mayella Lloclla define como “similar a algo de Tim Burton, algo que no se ha hecho antes en el Perú”. La cinta la dirige Daniel Rodríguez Risco.

Una de las grandes actrices españolas, Sánchez-Gijón, es parte de una generación dorada de actores integrada por Penélope CruzAntonio Banderas y Javier Bardem. De entre su extensa carrera de cine, teatro y televisión podemos elegir películas como Un paseo en las nubes (1995) con Keanu Reeves; La camarera del Titanic (1997) de Bigas Luna; Bajarse al moro (1988) junto a Banderas y la desaparecida Verónica Forqué, o más recientemente, Madres paralelas (2021) de Almodóvar.

Tras cuatro semanas de rodaje finalizó el trabajo de la actriz española Aitana Sánchez-Gijón en el Perú protagonizando al lado del talento peruano Mayella Lloclla la cinta «La Costurera».

Producida por El Colchón Films y dirigida por el premiado Daniel Rodríguez Risco (El Vientre, No estamos solos, Siete Semillas)., la cinta también tuvo en su elenco al actor chileno Luis Gnecco (Neruda, Una Mujer Fantástica, No).
Para su director, Daniel Rodríguez Risco trabajar con un elenco de esta categoría fue un placer y un desafío a la vez, en especial con Aitana Sánchez-Gijón: “Trabajar con Aitana lo resumo en dos palabras un placer y un privilegio, es una actriz que admiro desde hace mucho tiempo, tiene una sensibilidad un talento y además de ser una persona maravillosa», refiere el director.
«La conocí en Madrid, hace unos meses, cuando fuimos para ensayar y la prueba de vestuario, ahí tuve la oportunidad de asistir a una muestra donde ella representó al personaje de Medea, en un teatro pequeño llamado la Abadía y me di cuenta como una estrella de su magnitud tenía tal amor a su profesión, a lo que hace», expresa orgulloso.
«… que podía estar en un teatro pequeño o en una película de Hollywood y entregar todo. La experiencia a nivel de lo que le ha dado a la película (La Costurera) ha sido una impronta muy especial, estoy seguro que el público lo verá reflejado en la pantalla”, finaliza.

La actriz ítalo española protagonizará el largometraje de Daniel Rodríguez Risco, “La costurera”. Las grabaciones se inician el 1 de mayo en Lima. En entrevista con El Comercio habla de su rol en este filme, de su amistad con Mario Vargas Llosa, de la personalidad de Keanu Reeves y de por qué se alejó de Hollywood.

Es mi primera visita al Perú, un destino que siempre estuvo entre mis pendientes. Estoy fascinada con sus lugares, su gente y su comida. Después del rodaje, que se inicia el primero de mayo, visitaré Machu Picchu y la selva. Mi familia vendrá para hacer el recorrido juntos”, refiere la artista, cuyo nombre fue tomado de la hija del gran poeta español Rafael Alberti (quien le dedicó un poema, “Aitana, la niña nueva).

Sánchez-Gijón debutó a los 16 años como actriz de televisión en la serie “Segunda enseñanza” (1986) y a los 27 incursionó en Hollywood junto a Keanu Reeves, en el drama “Un paseo por las nubes”, en 1995. Ese mismo año estrenó “Boca a boca”, “La ley de la frontera” y “Balthasar el castrado”. Se convirtió en la actriz española de moda. Fue la primera mujer en presidir la Academia de Cine española en 1998 y ha ganado una Concha de Plata en el Festival de San Sebastián.

Recordada por su participación en la cinta ‘Un paseo en las nubes’ (1995) con Keanu Reeves; ‘La camarera del Titanic’ (1997) de Bigas Luna, o más recientemente, ‘Madres paralelas’, de Pedro Almodóvar; la actriz española Aitana Sánchez-Gijón se encuentra en nuestro país para formar parte de la cinta nacional ‘La Costurera’ al lado de la actriz nacional Mayella Lloclla.

Una de las más entusiasmadas con este proyecto precisamente fue Mayella, quien utilizó sus redes sociales para expresar su alegría de compartir el rol estelar con la estrella hispana.

“Por fin nos conocimos Aitana Sánchez-Gijón, qué hermoso proyecto que empezaremos #LaCosturera, con unos personajes tan potentes, muy feliz por lo que se viene”, escribió la también cantante.

Para Sánchez-Gijón es su primera vez en el Perú, un deseo que cumple con la filmación de ‘La Costurera’, una película dirigida por Daniel Rodríguez Risco (‘Siete Semillas’, ‘No estamos solos’) y cuyo rodaje comienza en mayo.

‘La Costurera’ cuenta la historia de una joven costurera de provincia que viaja a la gran ciudad para salvar a su marido enfrentándose a un círculo social muy cerrado donde priman el favoritismo y la corrupción. Ella logrará vencerlos con ayuda de sus únicas armas: su ingenio y su talento para la costura.

Mayella Lloclla se ha tomado una pausa de ‘Luz de luna 3’, la telenovela donde interpreta a la popular Bella, para filmar durante dos meses La costurera, una película en la cual tendrá su primer protagónico. La cinta la dirige Daniel Rodríguez Risco (El vientre, Siete semillas, El acuarelista) y es la oportunidad de trabajar con Aitana Sánchez-Gijón, la legendaria actriz española que ha llegado por primera vez al Perú.

El guion de La costurera ganó el Concurso Nacional de Proyectos de Largometraje de Ficción del Ministerio de Cultura en 2022 e incluye además a Luis Gnecco, actor que participó en Bardo de Alejandro Gonzales Iñárritu y en Una mujer fantástica, cinta chilena ganadora del Óscar a mejor película extranjera.

En anticipación del rodaje de la próxima producción de Daniel Rodríguez Risco, “La Costurera”; tuvimos el placer de hablar con las dos protagonistas de la cinta, la actriz nacional Mayella Lloclla y la actriz española de renombre, Aitana Sánchez-Gijón.

¿Qué les llamó la atención del proyecto? ¿Cómo lo eligieron?

Aitana: “Me gusta esta relación que surge entre las dos mujeres, tan distintas y antagónicas. Puedes notar que, a pesar de sus diferencias, puedes notar la fuerza y determinación que ambas comparten. Hay una diferencia de clase, de poder, entre ambas, pero ellas a notar ciertos paralelos entre ellas. También me gusto ese enfoque visual que quería usar Daniel, querer adaptar esta historia en una forma de fábula, contar una historia de una manera surrealista, aprovechando mucho la simbología.”

Mayella: “Bueno, yo ya trabajé anteriormente con Daniel en El Vientre. Conocía la trayectoria de sus películas, y siempre me gustó su estilo, parecido al estilo visto en una película europea. Trabajar en el Vientre fue una experiencia completamente gratificante. Lo puedo asociar bastante con el teatro, en la manera en cómo dirigió, con ensayos previos. Años después, me llamó para este nuevo proyecto, diciendo que este papel fue creado conmigo en mente, y eso fue increíblemente emocionante. Fue un hermoso regalo.”

Con un elenco que incluye actores nacionales e internacionales inicia rodaje este primero de mayo la cinta “La Costurera”, película dirigida por Daniel Rodríguez Risco (El Vientre, Siete Semillas, No estamos solos) y protagonizada por Mayella Lloclla junto a la primera actriz española Aitana Sánchez-Gijón.

La producción de la película está a cargo de la productora audiovisual latinoamericana El Colchón Entertainment. “La Costurera” marcará un precedente en el cine nacional por el especial uso de la producción digital y los efectos especiales que no se han visto anteriormente. Para lograr este objetivo se está creando un mundo fantástico con un enfoque atemporal, es aquí que entra el talento de Pepe Corzo como Diseñador de Producción, en su primer trabajo para la pantalla grande.

Cinencuentro publicó una crítica sobre nuestro film Trilogía Muda, firmada por Rafael Santisteban. Compartimos un extracto de la misma:

 

«Trilogía muda está compuesta por tres historias que inicialmente fueron presentadas de manera individual, pero que han atravesado una adaptación en postproducción para amalgamarse dentro de la evolución y madurez artística que Daniel Rodríguez ha completado en su carrera. Es que, como todo cineasta, el también director de El acuarelista ha estado en constante búsqueda de un estilo que ha ido convirtiendo en suyo, sin que ello signifique que la esencia de este haya sufrido cambios drásticos, sino más bien perfeccionándose dentro de sus preocupaciones morales y artísticas.»

Silvia, de El Vientre, desafía las nociones occidentales sobre la maternidad que designan a qué mujeres (no) se les permite ser consideradas madres y obliga a la audiencia a lidiar con hasta dónde podría llegar una mujer “respetable” para criar a un hijo propio.

Sin embargo, El Vientre también sugiere que el exceso de deseo maternal de Silvia es la fuente de su inestabilidad mental y su comportamiento inmoral, y una lectura crítica de la película expone un vínculo entre su infertilidad y su intermediación, las verdaderas fuentes de su monstruosa feminidad.

“Las arañas viuda negra son arácnidos conocidos por la apariencia única de las hembras y su tendencia a comerse a sus parejas”: malvadas, vengativas pero extrañamente elegantes.

En primer lugar, Mayella Lloclla (Mercedes) es inicialmente inocente, incluso crédula, pero rápidamente tiene que enfrentarse a la terrible verdad sobre su empleadora. Lloclla lleva la transición excepcionalmente bien y uno siente mucho por ella. Está atrapada, encarcelada e incapaz de controlar su destino y mucho menos el de su hijo por nacer. Su gama de emociones le permite desarrollar con éxito una fuerza interior a medida que avanza la película.

Vanessa Saba (Silvia) es la villana perfecta: arco, intrigante e implacable. Ella merodea por la película siempre con su objetivo firmemente en la mira. Saba minimiza maravillosamente a Silvia pero aun así logra dominar cada escena. ¿Qué más se puede pedir? ¡Ella es la personificación del mal, está hermosamente vestida y nunca tiene un cabello fuera de lugar!

Agregue a estas excelentes actuaciones, la dirección inteligente de Daniel Rodríguez Risco, una iluminación cambiante y una partitura evocadora.

“Con más de 30 películas de toda América Latina, Cine Latino es la selección más grande y brillante que jamás haya llegado a las costas australianas”, dijo el coordinador del programa Alex Castro.

Otros aspectos destacados del programa incluyen el último trabajo del cineasta de culto Alejandro Jodorowsky, Endless Poetry, una memoria fantasmagórica que se presentó en la selección oficial del Festival de Cine de Cannes de 2016; El soborno del cielo, del veterano director colombiano y colaborador de Gabriel García Márquez, Lisandro Duque Naranjo; y The Womb, de Daniel Rodríguez Risco, que es la primera película de terror auténtica y un gran éxito de taquilla del Perú.

Uno de los mayores éxitos de taquilla del año en Perú es The Womb, de Daniel Rodríguez; Un poco de sorpresa si se tiene en cuenta que la nueva película de Rodríguez también resulta ser una película de terror. No es una película de terror en los términos modernos del género, que se basa en gran medida en todo, desde metraje encontrado y sobresaltos hasta sangre, sino más bien en la idea tradicional de una película de terror que se trata tanto de la sugerencia de que suceden cosas malas como de lo que es. acerca de ver realmente esas cosas malas.

El vientre mantiene al público cautivo desde la primera escena hasta su inesperado desenlace. Para lograr esto, Rodríguez Risco se ha apoyado en un arduo trabajo que ha incluido la realización de entrevistas y sondeos de opinión con cineastas y público en general. El resultado es que sólo durante el primer fin de semana en cartelera, cerca de 70 mil personas fueron a ver la película en las 74 salas donde fue exhibida, una cantidad récord para una película peruana. Y no sólo eso, sino que la sorpresa aumentó cuando se supo que en las tres primeras semanas de proyección sumó más de 200 mil espectadores, lo que coloca a El vientre como la tercera película peruana más exitosa de los últimos cinco años.

El cine en Perú, durante mucho tiempo un bastión de importantes dramas centrados en temas como el terrorismo, la pobreza, las diferencias de clases y la raza, está atravesando una especie de revolución a medida que un número creciente de cineastas aprovechan los gustos de las audiencias locales y encuentran nuevos esquemas de financiamiento para lleva sus fotos a los plexos.

De ellas, la única que muestra virtudes es “El vientre”, de Daniel Rodríguez. Hay un tratamiento visual coherente; preocupación por la creación de atmósferas; actuaciones moduladas; una dirección artística que potencia el clima y el sentido de la película. Tiene una secuencia muy lograda: la muerte del personaje de Gianfranco Brero. Es verdad que el relato avanza con temor, que las influencias de Polanski se convierten en una camisa de fuerza (lo que ya ocurría en “El acuarelista”) y que a la película le cuesta radicalizarse en el horror y la desmesura, como ocurre con los modelos mayores del género: el cine de terror asiático, sobre todo el coreano, o el francés llamado “bis”. Pero, a pesar de eso, a Rodríguez se le reconoce su preocupación estilística (que roza la aplicación académica) y el notable empaque de su producción.

Convertido en el primer estreno comercial peruano del 2014, El vientre, segundo largometraje de Daniel Rodríguez Risco, es un relato clásico de suspenso que se desarrolla con mucha solvencia y minuciosidad. Es la figura del maquiavélico plan, el acoso sistemático y el enfrentamiento mortífero. El guión, elaborado por el director y su hermano Gonzalo Rodríguez, muestra desde la primera secuencia un personaje calculador, sutilmente glacial, que busca, escoge, sustrae de un espacio preexistente –un camal, en precoz metáfora de su propósito– y compra prácticamente un cuerpo, un recipiente, una incubadora móvil.

Rodríguez Risco muestra mucha habilidad detrás de la cámara. Renunciando a shocks baratos y sangre, el director es pausado en su enfoque, dejando que la historia se desarrolle a su propio ritmo. El suyo es un estilo cinematográfico casi clásico, en el que la máxima prioridad es crear una atmósfera y generar suspenso. En este caso, la casa casi abandonada donde se desarrolla la acción resulta adecuadamente siniestra.

El acuarelista es una cinta laboriosamente realizada y con un extremo cuidado en todos los detalles.

A eso se suma un pequeño universo que puede ya rastrearse en algunos de los cortos de Rodríguez, especialmente El colchón, Triunfador y El diente de oro. Seres excéntricos que tienen algo de etéreo y lunar, escenarios que rozan o se allanan por completo a la fantasía, fábulas adultas que trasuntan resonancias del teatro de Beckett y de Ionesco. La creación plástica está también en ciernes en esos primeros trabajos.